Para que este lanzamiento fuera posible, se precisó de un globo de totex de 1.200 g, un paracaídas militar, sistemas de cámaras GoPro y 360° que funcionaron a través de un cargador solar, sensores de presión, temperatura y humedad.
El peso total de la sonda alcanzó 2.246 gramos superando a la utilizada para enviar la chipa al espacio, de 800 gramos.
En cuanto a la altura, llegó a los 31.861 metros, captando a su paso espectaculares imágenes aéreas del suelo guaraní.
Pero el mayor distintivo, sin lugar a duda, fue el pintoresco sombrero piri que emprendió vuelo hasta lo más alto representando así a un pedazo de la tierra guaraní en el espacio. Otros elementos que también sobrevolaron fueron una bandera de Caaguazú, una escarapela del Paraguay y un botón representativo de los 200 años de la Congregación Marista.
Óscar González, coordinador general del Proyecto Arapy, comentó a Última Hora que el trabajo estuvo a cargo de estudiantes del colegio Inmaculada Concepción y alumnos de las facultades de Ingeniería y Politécnica de la Universidad Nacional de Asunción.
«Tenemos a nuestro cargo fabricar, montar y lanzar globos sondas para integrar la investigación espacial con la educación ambiental», puntualizó.
Todo lo enviado aterrizó a siete kilómetros del lugar de partida en la localidad de Repatriación.